Conepción Arenal en Compostela

JOSÉ MANUEL GARCÍA IGLESIAS

CELEBRAR los doscientos años del nacimiento de Concepción Arenal está
suponiendo, en Santiago, una puesta en valor de lo que distinguió a esta mujer
a la que se le rinde homenaje desde el Ayuntamiento, la universidad y otras
entidades, como es el caso del Ateneo.

Compostela contaba ya con un busto suyo. No sabemos nada, en este momento,
sobre su autor y momento en que se hizo tal obra. Probablemente debió de ser en
torno a 1920, quizás celebrando el siglo de su nacimiento. Como una cita culta,
con tintes de reconocimiento y homenaje, cabe entender esa rama con hojas que
parecen de laurel que discurren por su parte inferior, temática que nos evoca
las láminas con composiciones florales que se utilizaban, por entonces, en la
Escuela de Artes y Oficios, en un tiempo en el que era Jesús Landeira quien
estaba a cargo de las clases de Modelado y vaciado; antes había impartido, en
este mismo centro, Labra artística en piedra y madera. En lo demás nos aproxima
a la imagen que nos dan de esta mujer distintas fotos y alguna obra como el
busto suyo que guarda el Museo de Pontevedra.

Esta escultura pronto desapareció de los espacios públicos y no volvería a
estar al aire libre hasta el año 2013, en la zona de Porta da Peña. Ahora acaba
de reubicarse tras el denominado pazo de Raxoi que, originariamente, fue
Seminario de Confesores, Consistorio y Cárceles eclesiástica y secular.

Pues bien, ante la inmensidad del muro de aquellas dos cárceles está ahora
la imagen de quien, con tanta sapiencia, supo ver, en su tiempo, el horror del
mundo de las prisiones. Lugar perfecto, por ello, el elegido para la autora del
Manual del visitador del pobre -traducido a varios idiomas-, para la
visitadora de cárceles de mujeres...

Catedrático de Arte

Ver en El Correo Gallego