Carmen García Atienza: «Hay que rescatar a mujeres valientes y que rompieron con la tradición»

Las mujeres en el callejero de Santiago es el título de su sección en Radio Ateneo, un espacio digital de la entidad asociativa dedicado al formato de audio -podcast-. Carmen García Atienza (León, 1968) es licenciada en Derecho -tuvo de profesor en la facultad al que sería presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero: «Todas las chicas estaban locas por él», apostilla- y funcionaria del Concello de Santiago, cuya oposición aprobó con solo veinticinco años: «Quería independizarme, estar a mi bola, y la plaza en el Ayuntamiento fue una alegría y un regalo. Tan joven, con un buen empleo y un buen sueldo. Y ahora, con los hijos criados y una edad distinta, tengo la sensación de que comienza una segunda parte. Me gusta leer y escribir, estuve en varios clubes de lectura y, de forma accidental, surgió esto de la radio del Ateneo y me enganché».

Emilia Pardo Bazán es la última pieza que se ha publicado en la web, y las tres anteriores son Margarita Nelken, Federica Montseny y Victoria Kent. «Hay que rescatar a estas mujeres de relevancia internacional que se prodigaron en ternura, solidaridad, valentía, independencia o ruptura con la tradición. Tenemos que superar el concepto de mujer madre reproductiva y afirmar su personalidad, sin necesidad de estar justificando permanentemente su existencia. De la historia de la mujer se conoce poco y mal», señala Atienza. Otras mujeres extraordinarias del callejero local esperan ya en la programación de Carmen, como Maruja Mallo, María Casares, Alejandra Murguía o Xohana Torres; toda vez que personajes de la trascendencia histórica de Rosalía de Castro, Concepción Arenal o Clara Campoamor ya se pueden escuchar en el repositorio digital. «Faltan muchas mujeres en nuestro callejero, y sobre todo colectivos, como las lecheras, las anarquistas… Narón y Arteixo, por ejemplo, son dos concellos que tienen muchas mujeres en su nomenclátor», añade.

«Falta mucho para la igualdad de la mujer, dice Atienza, pero, donde más, en el ámbito doméstico»

Carmen Atienza advierte de que falta mucho para la igualdad de la mujer. «Pero donde más falta es en el ámbito doméstico, porque somos nosotras las que sabemos la talla de nuestros hijos, la cita con el médico… nosotras somos las que gestionamos la casa. Hay que darle una vuelta ya a la educación, que es la única solución», afirma. «Y mi ámbito profesional, la judicatura, todavía es muy conservadora: faltan mujeres en los tribunales y altas instancias. Además, la visión femenina enriquece. Se pierde mucho no estando en los puestos de decisión. Aún no hemos tenido una presidenta del Gobierno», concluye.

Interesada en la novela histórica y el Camino de Santiago, Atienza cita a su madre como la persona que le inculcó el gusto por la lectura: «Siendo yo pequeña, recitábamos juntas poesía, tenía una voz maravillosa. Mi madre fue una mujer especial. Era perito mercantil, tuvo cuatro hijos y estaba enamorada de Castilla y de Machado. Era tan feliz viendo los campos… Aunque natural de la provincia de Burgos, siempre vivió en León; pero era castellana de corazón». En cuanto a ella misma, dice que está «feliz y encantada» con su vida en Santiago, pero reconoce que León es su identidad: «Son mis raíces, donde me siento en mi lugar, a pesar de haber formado una familia en Galicia. Tampoco me habría gustado no haber salido de León. Todo es riqueza». Incapaz de quedarse callada, a Carmen no le importa la opinión general si algo no es de su gusto o lo cree injusto. «Los gallegos se callan, tienen miedo a que el grupo los rechace. En casa yo soy la rara, por mi franqueza o hablar, a veces, sin pensar en las consecuencias», advierte, haciendo gala de que no se muerde la lengua.

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